Mabel
La inflación por las nubes y los números no la registran.
Es una foto del promedio: No hay registro de lo real.
Mucho shampú, demasiado edulcorante, exceso de bestias durmientes.
La imagen me retuerce más tarde que nunca.
El hambre chaqueño me duele en las pupilas rompiendo las tripas llenas.
Pero con las tripas llenas el dolor ajeno es invisible.
Es un Dolor no reactivo, un Dolor que duerme la siesta.
Escribiendo lo que no escribo me enojo con mi pasivo lamento.
Y me digo de qué vale sentir tanto si me enfermo de parálisis solidaria.
A ver qué hago con todo esto, a ver si me despabilo.
A ver si nos pasa algo.
La foto era de Mabel Pino Fernandez. Y suponiendo que un dios existe, éste abandonó su corazón y su cuerpo de hambre mortal a los 45 años.
Previamente fue abandonada por la desidia general, mucho peor que el supuesto dios.
Etiquetas: desde mi cocina
3 Comments:
te adheri como lectura obligatorio en mi blog
Me encanta lo que hacés, me quedo un ratito viendo tu blog.
Me lo recomendó un amigo en común y sinceramente me encantó.
tamaña forma de escribir. espectacular. es un placer leer su blog. espero siga asi. suerte!!
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